Putas por veinte euros

Precios dinámicos Antonio, me dice O Bradoiro en plan alto ejecutivo lameculos de una vulgar consultora big four. ¡Precios dinámicos!

Ignoro de dónde se habrá sacado la idea este hombre, pero parece que no le va mal eso de poner los polvos a veinte euros en los horarios en los que apenas hay afluencia de clientela en su putiferio. Es decir, por las mañanas.

Son mañanas improductivas para las putas, que se dican a dormir, limpiar, discutir entre ellas por haberse quitado o tomado prestado algún posible cliente, jugar al parchis, a las cartas, depilarse, o lo que quiera que sea que hagan las putas en su tiempo libre.

Hay clientes que se escapan del trabajo para follarse a una putilla y dado que Casa Manola es la única casa de putas que abre en horario matinal, con la excusa del desayuno van y se desfogan un poco, a un precio de lo más asequible.

¡Si me sale más barato que sacar a comer o cenar a mi mujer, y con eso no tengo garantizado que me la vaya a follar! exclaman los mañaneros clientes como tratando de justificarse.

20 euros para mí, dicen las pocas putillas que por la mañana no están dormidas y les viene bien ese billetito para sus cosas.